lunes, 23 de marzo de 2009

Ernesto Cardenal. Nicaragua, 1925


Frente al monasterio, sobre la carretera,
hay un semáforo rojo y amarillo
que se apaga y se enciende día y noche.
Amarillo para la carretera
y rojo para el monasterio.
De noche nadie pasa por la carretera
ni nadie sale del monasterio.
Pero allí sigue el semáforo solitario
colgado sobre la carretera entre las estrellas
encendiendo y apagando su luz roja
y amarilla: roja-roja-roja
STOP-STOP-STOP
¡sólo la roja para el monasterio!




De Gethsemani (1960)





ESTRELLAS


El cielo estrellado es como una ciudad de noche

vista desde un avión: las estrellas son como calles

como supermercados iluminados / anuncios de neón

como moteles night-clubs cines y luces

-blancas y rojas- de los carros -que van y vienen-

por carreteras oscuras...

y se queman para nada:

un derroche de energía en la perpetua noche

como la energía aquí abajo perdida en el vacío

en avenidas tiendas cafés night-clubs moteles

cines con una superproducción de Clark Gable!



De Oración por Marilyn Monroe y otros poemas (1965)




Amada y amado. La amada

mira desde la alcoba la luna que asciende.

Una motocicleta en la calle acelerándose.

El amado sin prisa por ir a la cama.



De El telescopio en la noche oscura (1993)





Comentario


La vida en la poesía, la poesía en la vida. Así podríamos graficar en pocas palabras la obra de Ernesto Cardenal. Enriquecido por su entorno natal -historia, geografía, vivencias -, por el movimiento constante, por el misticismo, por el ascetismo, por la política, por la subversión, por el aislamiento, Cardenal logra plasmar en su creación la creación que él define como poesía pura. Ha observado que la poesía se remonta a la creación de todo, sin hipérboles. Ha observado que la "Palabra creadora" no fue sino poesía creadora y que es factible asumir que la poesía se hizo carne y se ha quedado entre los hombres.

Resulta de esta sabiduría una poesía sabia, siempre nueva, poderosa desde su fuente, en extremo coherente y plena de luces.

Cardenal articula magistralmente las coyunturas del tiempo, doma la rebelión del alma y genera una poesía exteriorista, de lectura entretenida, ágil y enriquecedora.




Ernesto Cardenal (Granada, 1925)


Nace en Granada, Nicaragua, el 20 de enero de 1925. Sus primeros estudios los realiza en León. Terminados sus estudios secundarios y de bachillerato en un colegio jesuita, viaja a México para estudiar Filosofía y Letras. Se gradúa con una tesis sobre poesía nicaragüense y deja México para dirigirse a la Universidad de Columbia, Nueva York, donde se dedica al estudio de la poesía norteamericana contemporánea. Entre los años 1949 y 1950, visita Italia, España y Suiza.

En la década de 1950 y de regreso a su país se incorpora de lleno a un activo movimiento poético, funda revistas literarias, escribe epigramas urticantes que se publican en volantes clandestinos. Se integra al movimiento de rsistencia contra la dictadura de Somoza García y participa en la rebelión de Abril de 1954.

La vocación religiosa contemplativa lo lleva a ingresar a un monasterio cisterciense norteamericano (Gethsemani) en Kentucky. Aquí toma contacto con Thomas Merton, monje escritor y maestro de novicios quien lo guiará en su vida monástica. Tras dos años de retiro y por motivos de salud, deja la trapa pero continúa su vida religiosa en el Monasterio Santa María de la Resurrección, en Cuernavaca, México.

En 1965 es ordenado sacerdote, tras concluir sus estudios teológicos en Colombia. Regresa a Nicaragua y decide fundar la comunidad contemplativa y evangelizadora de Nuestra Señora de Solentiname. En este ambiente escribe su libro El Evangelio de Solentiname. A esta altura ya ha publicado sus Epigramas, Salmos, la Oración por Marilyn Monroe y Gethsemani.

En 1979, constituído el Gobierno de Reconstrucción Nacional de Nicaragua, se le designa Ministro de cultura.

En 1985 es amonestado e increpado por el Papa Juan Pablo II quien visitaba oficialmente Nicaragua, debido a haberse pronunciado con doctrinas apóstatas y formar parte del gobierno sandinista. En 1994 renuncia al Movimiento sandinista de liberación nacional por diferencias con Daniel Ortega.

En el año 2005 fue nominado al Premio Nobel de literatura.

En 2007 vuelve a México y se reúne con el subcomandante Marcos del Ejército Zapatista de Liberación Nacional.

Ha publicado además, El Estrecho dudoso (1966), Canto Nacional (1973), Oráculo sobre Managua (1973), Los Ovnis de Oro (1988), Vuelos de Victoria (1984), Canto Cósmico (1989), El telescopio en la noche Oscura (1993). Su última publicación ha sido Pasajero de tránsito (2008).

No hay comentarios:

Publicar un comentario